Grifería negra, la última tendencia en cocinas modernas

Aunque, tradicionalmente, el cromado ha sido el tipo de grifería más popular, en los últimos años, las griferías de colores han ido abriéndose hueco en nuestras cocinas, sobre todo las de color negro. Suelen ser en mate y se combinan con otros elementos también en color negro, como los tiradores de los muebles o las lámparas.

El negro es un color neutro que combina perfectamente con cualquier color, textura y material, por lo que puede adaptarse sin problema a cualquier estilo decorativo al mismo tiempo que le confiere personalidad y elegancia al espacio.

Por eso, estamos convencidos de que es una tendencia que ha llegado para quedarse mucho tiempo. Sin duda, un gran aliado para renovar la decoración de la cocina, creando un impacto visual increíble.

Grifería negra: una opción de lo más versátil

La grifería negra aporta personalidad y carácter a cualquier cocina, teniendo la cualidad de cambiar y moderniza por completo la estética de la cocina de forma sencilla y barata. Y lo mejor de todo es que encaja prácticamente con cualquier estilo decorativo.

Cocinas blancas con grifería negra

Las cocinas blancas son atemporales y, debido a sus numerosas ventajas, nunca pasan de moda. Proporcionan una gran luminosidad a cualquier estancia, ya que reflejan la luz natural, lo que da una mayor sensación de amplitud visual, siendo una magnífica elección para cocinas pequeñas. La grifería negra aporta originalidad, elegancia y un toque de color. Y ambos conforman una combinación ideal que nunca pasa de moda, básica dentro del estilo minimalista moderno.

Cocinas de estilo nórdico

El color negro también empieza a colarse en las cocinas de estilo nórdico, que destacan por tener siempre el color blanco como protagonista y por la presencia de materiales naturales como la madera. La grifería negra encaja perfectamente con el color blanco y la madera, aportándole contraste y personalidad.

Cocinas de estilo industrial

El estilo industrial se remonta a la década de los 50, concretamente a la ciudad de Nueva York, cuando muchos artistas y bohemios convirtieron las fábricas en viviendas tipo loft. Es así como nació este estilo decorativo que nunca pasa de moda.

Su característica principal son los espacios abiertos con estructuras a la vista y materiales sin cubrir. Además, es frecuente el uso del acero negro, el hierro y la madera, siempre en colores neutros como el negro, el gris y los tonos tierra. Por eso, la grifería negra encaja muy bien en este estilo de decoración.

Contrastes en espacios minimalistas

Las griferías negras son ideales para cocinas minimalistas que destacan por la ausencia de elementos y por las líneas puras. Rompen con la uniformidad, pero si, además, el color de los muebles es claro, el contraste es todavía mayor.

Con todo tipo de colores

El negro combina perfectamente con el gris. Estos dos colores que, a priori, pueden parecer aburridos, juntos encajan muy bien. Pero lo cierto es que es todo tipo de colores y acabados. Permiten combinaciones cromáticas espectaculares, pudiendo adaptarse a diseños más coloridos y vanguardistas.

¿Cómo elegir el grifo de cocina?

La grifería es uno de los elementos protagonistas de las cocinas, por lo que es fundamental dedicar el tiempo necesario para elegir el modelo adecuado. En la actualidad, podemos encontrar una gran variedad de opciones en el mercado: extraíbles, monomando, bimando, electrónicos, de pared, etc.

Pero no hay que olvidar que, además de la estética, otros aspectos importantes son la calidad y la funcionalidad. Ten en cuenta que, aunque nuestros gustos influyan mucho en la elección, es esencial coger un modelo de calidad y duradero que dure mucho tiempo, ya que vamos a usarlo muchas veces a lo largo día.

Otro factor a tener muy en cuenta es la limpieza. Escoge un modelo que sea fácil de limpiar y de mantener. Es importante que la cala no se acumule, ya que cuanto más lo haga, más costará quitarla. Y, para que se mantenga en perfectas condiciones, hay que secarla después de cada uso y usar jabones neutros que no sean abrasivos.

Además, es recomendable apostar por grifos que ahorren agua, como la grifería termostática en la que podemos disponer de agua caliente instantánea a la temperatura deseada. Ideales para ganar en seguridad y controlar el gasto de agua.

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