A la hora de diseñar una nueva cocina, hay una serie de errores habituales que pueden ser catastróficos tanto desde el punto de vista práctico como estético. Desde problemas de distribución hasta decisiones de diseño poco prácticas. Evitar este tipo de errores puede marcar la diferencia entre una cocina cómoda y bonita con la que puedas sentirte a gusto muchos años y una en la que te acabes sintiendo frustrado constantemente.
En este sentido, es muy importante tener en cuenta aspectos como la distribución, la ergonomía, el flujo de tráfico y tu estilo de vida, ya que te ayudará a crear una cocina que se adapte perfectamente a tus necesidades y que, además de ser bonita, sea práctica. Desde Kuchen Art te ayudamos a resolver las dudas.
1. Ignorar la distribución del espacio
Uno de los errores más comunes al diseñar una cocina es ignorar la distribución del espacio. Es fundamental tener en cuenta la disposición de los elementos principales, como la hornilla, el fregadero y la nevera, para que puedas moverte cómodamente mientras preparas la comida. Evita colocar estos elementos demasiado lejos entre sí para facilitar el flujo de trabajo. Intenta crear un triángulo de trabajo bien definido, con cada uno de estos elementos ubicados a una distancia razonable entre sí.
2. No considerar el almacenamiento adecuado
Otro error bastante habitual es no tener en cuenta el almacenamiento adecuado. Debes asegurarte de que haya suficiente espacio de almacenamiento para tus utensilios de cocina, electrodomésticos y alimentos.
Por eso, antes de comenzar con el diseño, haz una lista con tus necesidades de almacenamiento para poder realizar una planificación más óptima. Para aprovechar al máximo el espacio disponible, incluye soluciones inteligentes, como estanterías empotradas, cajones organizadores y armarios hasta el techo.
3. Descuidar la iluminación
La iluminación es un aspecto crucial pero que muchas veces descuidamos a la hora de diseñar nuestras cocinas. Un error bastante habitual es depender únicamente de la iluminación general, lo que puede crear sombras indeseadas y hacer que la cocina parezca fría e impersonal.
En este sentido, es recomendable combinar diferentes fuentes de iluminación, como luces empotradas, colgantes sobre la isla y luces LED debajo de los armarios, para crear un ambiente más luminoso y acogedor. Además, asegúrate intenta instalar ventanas y puertas de vidrio para aprovechar al máximo la luz natural.
4. No pensar en la ergonomía
La ergonomía es un factor clave a considerar a la hora de diseñar una cocina. Debes tener en cuenta la altura y la ubicación de los electrodomésticos, así como la altura de los muebles y el espacio de trabajo, para que podamos trabajar cómodamente y sin esfuerzo.
5. No tener en cuenta el flujo de tráfico
El flujo de tráfico es otro aspecto importante a considerar al diseñar tu cocina. Es fundamental asegurarse de que haya suficiente espacio para que varias personas puedan moverse cómodamente alrededor del espacio, sobre todo si estás pensando en instalar una isla o una barra de desayuno.
Evita colocar muebles o electrodomésticos en lugares que obstaculicen el paso y asegúrate de dejar suficiente espacio entre las distintas zonas de trabajo y de paso.
6. Elegir materiales difíciles de limpiar
Al seleccionar materiales para tus mostradores, pisos y gabinetes, es importante pensar en la facilidad de limpieza y mantenimiento. Un error bastante frecuente es elegir materiales que sean difíciles de limpiar o que requieran un mantenimiento constante, lo que, con el tiempo, puede hacer que la cocina se vea desordenada y descuidada.
En su lugar, opta por materiales que sean duraderos y fáciles de limpiar, como el cuarzo para los mostradores, el azulejo para los suelos y el acero inoxidable para los electrodomésticos. De esta forma, podrás mantener tu cocina siempre impecable.
7. No tener en cuenta el estilo de vida
Al diseñar tu cocina, es importante que tengas en cuenta tu estilo de vida y tus hábitos culinarios. Dedica tiempo a valorar tus necesidades y preferencias individuales.
Si pasas muchas horas en la cocina, puede que te merezca la pena invertir en electrodomésticos de alta gama y en disponer de mucho espacio de trabajo.
En cambio, si sueles comer fuera habitualmente o tus comidas no son muy elaboradas, puedes optar por un diseño más sencillo.
8. No planificar para el futuro
Cuando estés diseñando tu cocina, es importante pensar en el futuro y plantearte cómo puede cambiar tu estilo de vida con el tiempo. Evita tomar decisiones a corto plazo que puedan limitar tus opciones en el futuro, como elegir un diseño demasiado específico o una distribución poco flexible.
En su lugar, opta por soluciones más flexibles que puedan adaptarse con facilidad a tus necesidades cambiantes, como gabinetes modulares y electrodomésticos actualizables.
0 comentarios